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Después de haberse realizado el
diagnóstico de enfermedad celíaca e instaurarse el régimen sin gluten, el
paciente debe notar los beneficios de esa terapéutica, luego de unos
cuantos días, razón más que valedera para que se enfrente con tentaciones y
peligros.
Debemos tener en cuenta que después de una dieta libre de gluten, el
intestino delgado recuperado, es particularmente sensible a éste por lo que
recomendamos aferrarse absolutamente a las reglas que suprimen el gluten,
ya que de no adecuar la ingesta de alimentos, se corre el riesgo de tener
una recaída grave. Conclusión; RECHACE EL GLUTEN.
Puede usted notar que después de un
cierto tiempo de tratamiento, aún tiene más problemas de flatulencia y que
algunos platos ricos en grasa pueden provocarle molestias. Debe recuperar
su aparato digestivo por medio de comidas ligeras y regulares. Asimismo
asegúrese que duerme lo suficiente. Evite largas sesiones de trabajo o de
juego. Evite el exceso de alcohol.
En el caso que usted coma algo de gluten,
por equivocación, no se desespere, deberá esperar por si solo se elimine a
su debido tiempo, ya que los efectos desagradables duran entre 24 y 48 hs. aproximadamente.
Tenga en cuenta que como cualquier otra
persona usted puede, ocasionalmente, resfriarse, enfermar o padecer de
trastornos digestivos, no debiendo por esto, asociar estas contingencias a
su condición de celíaco. Si así lo hiciera, toda la familia pagaría el
precio por su equivocación.
Teniendo en cuenta que la actividad de la
mayoría de las personas celíacas se desarrolla fuera del ámbito del hogar,
se les recomienda escoger aquellos platos que indudablemente son seguros,
tales como: carne, pollo asado, pescado, verduras, ensaladas, etc.
En caso de invitaciones a comer, en casa de amigos, es aconsejable advertir
al anfitrión con tiempo suficiente, que su estado no le permite comer
harinas, evitándole la penosa situación de tener que rechazar alguno de los
platos que le han preparado. En caso de que usted considere no mencionar la
razón de su dieta, es mejor que coma en su casa, siendo ésta una buena
recomendación para aquellas personas que se ven forzadas a asistir a
comidas públicas, deseando por esto que la comida no se transforme en una
obsesión.
Finalmente, manténgase siempre en
contacto con aquellos médicos que tienen especial interés en los problemas
del celíaco. Es aconsejable que se efectúe una revisión anual cuando usted
se hace mayor. En forma más optimista: si se mantiene al corriente con la
ciencia médica, puede que algún día le lleguen noticias de algo muy
importante en su provecho.
Fuente: www.guiadelceliaco.com.ar
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